lunes, 12 de marzo de 2007

CUIDADO DE LOS SOCIOS

Por: Zoila Buelvas de Medina.

El cuidado de los socios nuevos y la perseverancia de los que ya hicieron su
promesa, es responsabilidad del vicepresidente, de quien lo recluto y por supuesto de todos los socios.

ALTERNATIVAS DE FORMACION QUE BRINDA EL PRAESIDIUM.

Desde su llegada el candidato percibe que la Legión de Maria, gira en torno a un principio: EL ESPIRITU DE LA LEGION ES EL DE MARIA MISMA, ella bajo la acción del Espíritu Santo y en íntima relación con su hijo Jesucristo, para hacer la voluntad del Padre..

En esta línea de sucesión, el legionario se propone colaborar efectivamente en su propia salvación y en la de los demás. Por eso decimos con mucho agrado LA LEGION DE MARIA, ES MARIA EN ACCIÒN.

El praesidium es un destacamento del ejército de hijos y soldados de Maria que se animan mutuamente en la oración, en el servicio, y en la lealtad, disciplina que se asume con amor.

El praesidium toma sobre sí la responsabilidad de proporcionar a los socios la formación doctrinal y pastoral, para su crecimiento.

El praesidium adaptándose al presente, vivificado por una renovación espiritual, conserva el espíritu y los anhelos de nuestro fundador y los fines propios, patrimonio de nuestro movimiento.


En el praesidium, místico hogar de nazaret, aprendemos como vivir la espiritualidad de comunión y participación, fundamento ayer hoy y siempre de la Iglesia, que la Legión vive como:


VIDA ESPIRITUAL, UNIDAD CON JESUCRISTO
“Solo el que permanece unido a mi, dará abundantes frutos.” Juan 15,4


VIDA APOSTÒLICA: Participación en la misión de la iglesia, según las estructuras de cada Diòsecis.


VIDA COMUNITARIA: Unidad con los hermanos.Recordemos el estilo de vida de la primera comunidad cristiana. Es la convivencia pacifica y el respeto por los derechos y responsabilidades de cada uno.

En la encíclica DEUS CARITAS EST,- DIOS ES AMOR, S.S.- Benedicto XVI dice: “El espíritu es esa potencia interior que armoniza el corazón con el corazón de Cristo y lo mueve a amar a los hermanos, como El nos ha amado.

El espíritu es la fuerza que transforma el corazón de la comunidad eclesial, para que sea en el mundo, testigo del amor del Padre, que quiere hacer con su Hijo una sola familia.”

Existe comunicación afectiva cuando el socio se siente en libertad para dar su opinión,ó porque percibe la comprensión y el apoyo de sus hermanos.


El ejemplo arrastra, si todos guardan entre si y con sus oficiales el debido respeto, aquel que llegue actuará de igual forma.


PARA CONCRETAR EL CUIDADO DE LOS HERMANOS QUE LLEGAN.

QUIEN LO RECLUTÒ DEBE:

Recordarle el día, hora y lugar de la reunión, uno o dos días antes.

Recogerlo y acompañarlo después de la reunión.

Al llegar presentarlo ante los hermanos. Entregarle la Tèssera.

El vicepresidente en el momento indicado le dará la bienvenida, ojala prepare un mensaje diferente para cada ocasión.

El presidente debe preparar juntas amenas y agradables; la rigidez ahuyenta a cualquier persona, mucho mas si es joven. Desde el momento en que el socio ingresa al praesidium, comienza su actividad de formación espiritual y ejercicio del apostolado.

Asignarle trabajo inmediatamente, ojala en compañía de quien lo reclutö, siempre con base al sistema maestro-aprendiz y sin llegar a ser demasiado permisivo, tener en cuenta su situación particular. Esto va también con los socios veteranos.

Su pareja en el trabajo debe ser puntual en la cita y facilitarle el encuentro, orar con él al iniciar la tarea.

Acercarse a su familia, especialmente si se trata de un jóven.

En todo momento los socios deben demostrarle que la Legión es para personas ordinarias, no para superhombres o supermujeres.

Enseñarle qzue la santidad, es hacer la voluntad de Dios en los asuntos ordinarios de la vida.

No exigirles pruebas que ni aun los veteranos podrían cumplir.


Así pues hermanos, concientes de nuestra responsabilidad, asumamos con entusiasmo la tarea del reclutamiento, el cuidado y perseverancia de nuestros hermanos.

No sea que el Señor llegue algún día a preguntarnos ¿DONDE ESTA TU HERMANO?, y nosotros avergonzados no sepamos responderle
.
De la mano de María aprendemos su generosidad. Y a través de nosotros Ella espera seguir ejerciendo su maternidad, con aquellos que nos ha confiado el Señor y con los que esperan que alguien les anime a servir en el apostolado de la
Legión de Maria.


HACIA LA PROMESA LEGIONARIA.
Por : Zoila Buelvas de Medina. – De la serie Reclutamiento y Cuidado de los Socios

Terminados los tres meses de prueba, los oficiales en su reunión bimestral, analizan el comportamiento del candidato; si es satisfactorio y el socio acepta, lo preparan para su promesa, si pide más tiempo, se le concederán otros tres meses.
Si ha tenido dificultades, a juicio de la oficialidad, se le amplía el período de prueba hasta completar un total de seis meses, en ambos casos terminado el tiempo adicional, el candidato decide si se acoge a la disciplina , se dispone para la promesa. Manual. Cap. 13 num.11.

Durante el tiempo de prueba se le debe animar a buscar la intercesión de la Santísima Virgen, para obtener del Espíritu Santo, el don del discernimiento y no descuidar su esfuerzo personal.

El tiempo de prueba da al aspirante la oportunidad de descubrir la diferencia de un apostolado individual, vago e indefinido y la importancia de un apostolado concreto, hecho con el espíritu de María; esta certeza le llevara a desear ingresar formalmente a las filas legionarias y entregarse en las manos de la Madre para servir mejor al Hijo.

Si le indujésemos a la Promesa Legionaria sin la debida preparación y la advertencia de que tendrá alegrías y dificultades, le engañaríamos; antes bien, debemos invitarlo a poner su confianza en la santísima Virgen; quien viendo la fé y la esperanza puestos en Ella , le recibirá amorosamente y le acompañará en todo momento..

Terminada la prueba, debe tener los conocimientos necesarios para que sus actos humanos y su disposición espiritual estén en línea perfecta para desear su ingreso libremente y sin presiones.

Debe manifestar explícitamente que acepta realizar su promesa y los compromisos que conlleva.

El l candidato debe tener claro que ingresa a la Legión de María, para hacer todo el bien que le fuere posible, porque ante el Espíritu Santo se comprometió a ser instrumento de sus poderosos designios y sus hermanos así se lo han enseñado siendo disciplinados, valerosos y con ‘plena confianza en su Reina y Capitana acometen todos sus trabajos.

Todo el Praesidium debe preparase para la promesa, orando por el nuevo socio y por la gracia de poder presentar a Jesús y María un nuevo apóstol. Por su parte el aspirante durante la semana que precede, se preparará espiritualmente y si la oficialidad lo permite invitar alguien de su familia, evitando tratar en esa junta asuntos que comprometan el secreto legionario..


La Legión de María ruega encarecidamente,-así lo entendemos cuando se nos invita a la lealtad- que el candidato se abstenga de este acto a la ligera, si en el interior de su corazón no alberga el deseo de santificarse a ejemplo de la pureza de la buena madre María. La purificación de sus imperfecciones es condición obligada para buscar la unidad con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Hecha su Promesa el legionario entra a formar parte del ejército de María, en perfecta alineación con Ella, para ejecutar la voluntad de Dios Padre, no sólo durante su junta semanal y realización del trabajo asignado sino en permanente actitud de santificación y servicio- durante las 24 horas del día.-

Muy comedidamente invito a todos los legionarios a revisar y aplicar el capítulo l3 del Manual ADMISION DE SOCIOS.

Con este artículo finalizo la serie de RECLUTAMIENTO Y CUIDADO DE LOS SOCIOS ACTIVOS. Invito –muy respetuosamente – a que algún hermano legionario nos escriba sobre el reclutamiento y cuidado de los auxiliares.

Visítame en: Legiocomentarios.blogspot.com.